El reporte de quemados con pólvora en el Valle del Cauca, cinco personas con lesiones por el uso de estos elementos en solo cinco días, y en la víspera de las festividades navideñas, tiene preocupadas a las autoridades de Salud.
“Tenemos una en Cali, Tuluá, Buga y Bugalagrande, tenemos uno anterior al primero de diciembre, un niño que se quemó con totes y tenemos quemaduras de segundo grado que producirán su deformación”, dijo la secretaria Departamental de Salud, María Cristina Lesmes, frente a los casos que ya se presentan en la región pese a las campañas y los llamados permanentes para evitar el uso de la pólvora por parte de personas inexpertas, especialmente los menores de edad.
La situación es delicada para el sistema de salud, según precisó la funcionaria, pues al trabajo que se adelanta para evitar la propagación del COVID-19 en el Valle, ahora se suman los quemados con pólvora. “Tenemos dos días seguidos con más de mil personas con COVID en el departamento, hoy le pedimos a los vallecaucanos un comportamiento ejemplar para disminuir el contagio de esta enfermedad”, sostuvo Lesmes.
Por su parte, la gobernadora del Valle, Clara Luz Roldán, insistió en que es necesario que la comunidad entienda la afectación que causa el uso de pólvora y aún más el drama que viven las familias cuando uno de sus seres queridos se quema con estos elementos.
“Hoy quiero pedirles a los vallecaucanos que reflexionemos acerca del uso de la pólvora en manos de personas inexpertas. La pólvora es un riesgo para nuestros niños, nuestros adultos mayores y nuestras mascotas, que se afectan cuando se manipulan estos elementos sin responsabilidad”, aseguró la mandataria.
Para las autoridades de Salud del Valle es lamentable que se presenten casos como el ocurrido en las últimas horas en Cali, donde una mujer de 28 años sufrió quemaduras en su rostro y manos al ser impactada por pólvora manipulada por terceros.