El Petronio Álvarez entre buena gastronomía y homenaje a la vida

Foto: Guillermo Gutierrez Molina

Quienes visitaron la zona gastronómica del Festival Petronio Álvarez , se deleitaron con los sabores del Pacífico. En los más de 62 stands se degustan de deliciosos platos de la cocina tradicional, al tiempo de aquellos que no son tan común y buscan captar el paladar del público asistente.

Entre los más visitados y que llamó la atención,  el stand Helados Makerule, hechos de frutas del pacífico como chontaduro, badea, borojó, coco y dos sabores no tan comunes: Naidí y Mil pesos, con altos niveles de antioxidantes. El Naidí y Mil Pesos son dos palmas que se caracterizan por sus propiedades nutricionales.

Nataly Ibargüen Carbonero, del stand Kilombo Ancestral, es el segundo año que participa en el Petronio, es emprendedora de productos veganos hechos con frutos del pacífico como galletas y el pan relleno con dulce de chontaduro, cocadas con sabor a piña, mango viche y chontaduro y el ají de borojó con pipilongo. “Con el ají de Borojó lo especial que tiene aparte de tener pipilongo es que la materia prima la cultivamos en nuestras huertas, así que tiene algo más orgánico y sentimental, .agregó. “El pipilongo es una especia parecida a la pimienta, lo procesamos con el ají de borojó y se usa para adobar a los mariscos, de esta forma le da un sabor delicioso”.

Las tradicionales cocadas no pueden faltar, en el stand Cocos Merita encontrarás las cocadas asadas, son bajas en azúcar y se aliñan con ingredientes del pacífico dijo Mayra Alejandra Obregón emprendedora de esta iniciativa.

Además en su noche de gala del Festival Petronio Álvarez, los asistentes fueron testigos de los “Recuerdos cantados”, un ritual de sanación donde se  rindió homenaje a la vida,  a la muerte y  al  pacífico colombiano.

El show que estuvo a cargo de las cantaoras del pacífico residentes en la ciudad, puso a vibrar el alma y el espíritu de la ciudadela, a través de los “alabaos”, que cataron para sanar el corazón, las  heridas, por la memoria de los cinco niños de Llano Verde,  Junior Jein,  por las personas que han muerto durante los días de pandemia y la protesta social.

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Foto: Ruales

Así lo resaltó Ana Copete, organizadora del festival, “estoy absolutamente conmovida, acabamos de ver la apuesta en escena donde quisimos rendirle homenaje a las vidas que hemos perdido, especialmente  a estos cinco chicos que estamos todavía conmovidos  por lo que ha sucedido. Pero no solamente ellos, sino también los muertos  que han  sucedido a causa de la pandemia, el estallido social. También queremos rendirle  un homenaje a lo que está pasando en el pacífico y en el festival queremos decir que no estamos indiferentes  a esa realidad.  Por ello trajimos a las cantaoras de los  ritos  prontuarios del pacífico, de la Casa del Chontaduro, del oriente para que nos conmoviera y nos ayudara a conectar con esa realidad que sucede  ya que es importante que desde la plataforma del festival, también se haga una denuncia  de lo que está pasando en el pacífico y lo que está pasando con la migración pacífico en Cali”.

Con la puesta en escena de ¿Quién los mató?, interpretada de por Nidia Góngora y Hendrix B, acompañados de velas, globos y jóvenes elevando cometas,  pusieron los sentimientos del público a flor de piel. “Me siento muy feliz de estar aquí  en el Petronio, era para nosotros un sueño, algo que queríamos realizarlo. La presentación de esta noche tuvo  muchos sentimientos encontrados,  en estas fechas es importante recordar a estos seres queridos y a los amigos que han caído a lo largo de los años, porque creo que un país sin memoria está condenado a repetirlo”, aseguró el cantante.

Es que en sus 25 años, este festival busca recordarle al mundo, porque es una tradición que inspira, que salvaguarda el legado cultural y promueve un encuentro de hermandad que después de unos años de pandemia, fue escenario de re encuentro  al ritmo de la chirimía, la marimba, los tambores y demás instrumentos insignias del litoral.

Para la maestra Cristina Mosquera González, “la noche es importante porque somos sobrevivientes de lo que es la pandemia, y sobre todo volvernos a encontrar, a re encontrarnos con los amigos, con la cultura, con los ancestros, es importante para nuestra etnia, para nuestro pacífico, para la hermandad y para la ancestralidad”.

La noche también contó con la participación de las agrupaciones ganadoras de este espacio en el 2019,  quienes fueron los  encargados  de subir el espíritu  de alegría, y de poner a bailar a los asistentes. Además de un ensamble con los artistas residentes en Cali, que han mantenido la herencia  cultural  los cuales  interpretaron las canciones tradicionales del pacífico para cerrar la noche.

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