La campeona de taekwondo Lisa Gjessing, ansiosa por conseguir la gloria en los Juegos Paralímpicos Tokio 2020

Lisa Gjessing ha conseguido casi todo en el taekwondo Paralímpico -tiene cuatro títulos en campeonatos mundiales, por ejemplo- pero cuando habla de sus primeros Juegos Paralímpicos lo hace con el vertiginoso entusiasmo de una adolescente.

 

«Ya lo estoy visualizando. Quiero ir ya», declara la danesa campeona, espcialista en la modalidad -58kg K44. «Estoy muy entusiasmada por la Ceremonia de Apertura. Siempre he sido muy apasionada de los Paralímpicos, de ver reunirse a gente de todo el mundo que compite entre sí sin pensar en su raza o religión. Es un evento maravilloso y ser parte de él ha sido un gran sueño desde hace muchos años».

Gjessing no sabía si su deporte llegaría a ser incluido en el programa alguna vez. «Estaba contenta solo con poder competir en campeonatos mundiales, pero cuando los Paralímpicos se volvieron una posibilidad, nada iba a impedirme ser parte de ello. No tenía alternativa: tenía que hacerlo. Ha sido mi meta desde que mis hijas eran muy pequeñas, y ahora tienen 12 y 15, así que ha pasado mucho tiempo» afirma. «Nunca he estado tan decidida para una competición como lo estoy para esta. Trabajo a tiempo completo y soy madre, así que en el pasado he tenido que reorganizarme mucho», explica Gjessing.

«Para los Paralímpicos he tenido más apoyo que nunca, tanto de mi federación como de mi trabajo. Mi mente está enfocada en hacer todo lo que pueda para lograr que suceda. Estoy muy motivada y no hay excusas para no estar 100% preparada», añade.

  Gjessing era miembro del equipo de taekwondo sin discapacidad en Dinamarca hasta que desarrolló un cáncer. Su mano izquierda fue amputada en mayo de 2012 y tuvo que reaprender su deporte. «Al regresar, hubo cierta adaptación, porque usas todo tu cuerpo en el taekwondo. Pero al tratarse básicamente de patear, puedo hacer gran parte de lo que hacen otras personas que practican este deporte».

Gjessing ejerce de jurista para la dirección del cuerpo policial de Dinamarca. La pandemia de COVID-19 le ha otorgado flexibilidad para proseguir sus entrenamientos. «Me han permitido entrenar por la mañana y trabajar por la tarde. Es algo ajetreado pero es genial. Y mi familia se ha involucrado: vienen también a los campos de entrenamiento, lo cual es bonito. Les he estado enseñando a mis niñas a patear».

Competir en Tokio 2020 cerrará un círculo que comenzó nueve años atrás. Mientras se recuperaba, los Juegos Paralímpicos de Londres 2012 fueron una inspiración para ella. «Después de la cirugía me sentía insegura sobre quién era. Luego vi los Juegos en Londres 2012, y quedé deslumbrada por esa gente que formaban parte de algo más grande que ellos mismos. Yo también quise hacer eso».

Finalmente lo ha hecho, y con estilo. “Ha sido muy loco. La gente me dijo que tendría una depresión después de mi amputación. No la tuve. En cambio tuve otra cosa, algo que me llena de amor, de cariño y de oportunidades. Claro que me gustaría tener dos manos, haría algunas cosas más fáciles, pero definitivamente mi vida no es peor desde que sucedió aquello. Amo mi vida y estoy agradecida».

Fuente: Paralympic.org

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *