Las pesas de Colombia siguen cosechando logros a nivel internacional y se encuentran de plácemes por el reconocimiento a los halteristas Ismail Romero, Mabel Mosquera y Diego Salazar quienes ingresan al salón de la fama de la Confederación Panamericana de Levantamiento de Pesas, como los más sobresalientes del país en los cien años de la halterofilia continental.
La Gala se llevará este sábado 22 de agosto a las 6:00 dela tarde, hora de Colombia, en ceremonia virtual, donde estarán presente por Colombia, además de los deportistas exaltados; el Ministro del Deporte Ernesto Lucena, Baltazar Medina, presidente del COC y William Peña, presidente de la Federación.
La Confederación hizo un repaso de todos los competidores en las diez décadas de historia y seleccionó a los mejores 20 del área, entre ellos los tres colombianos en mención.
El organismo fijó como parámetros para la escogencia, aspectos como: Haber sido medallistas en campeonatos panamericanos, Juegos Panamericanos, con records en estos eventos; medallistas mundiales y olímpicos, haber sido deportista íntegro, disciplinado, sin investigaciones de dopaje y haber continuado vinculado al deporte luego de su retiro.
De los tres pesistas colombianos destacados en el Hall, Mabel Mosquera y Diego Salazar, son los más recordados por el menor tiempo que tuvieron sus logros; mientras que Juan Romero quien hace 50 años alcanzó sus grandes gestas, seguramente muchos no lo recuerdan o saben de él.
ABRIÓ LOS TRIUNFOS INTERNACIONALES
Juan Romero, quien se cambió su nombre a Ismail, por su religión islámica, fue el primer medallista de oro internacional que tuvo Colombia en campeonatos suramericanos, Panamericanos y Centroamericanos, entre 1968 y 1971, año en el que ganó las cuatro medallas de oro en los Juegos Panamericanos de Cali, siendo la gran figura para Colombia al lado de Martín Emilio “ Cochise” Rodríguez y Olga Lucía de Angulo.
Romero, pudo ser el primer medallista olímpico para las pesas de nuestro país en Múnich 72. Por un mal procedimiento de su técnico Arrutiniami Spartak se arruinó esa gran posibilidad.
Así lo contó: “Una lesión que tuve me hizo llegar con algo de sobrepeso a los olímpicos. Comencé a disminuir la comida, pero un día antes de la competencia tenía un kilo por encima del peso. Esa noche comí suave y le dije a mi entrenador que necesitaba suprimir líquidos y hacer terapia de sauna desde la misma noche; me dijo, no, mañana a las 7:00 vamos; pues se apareció ese día a las 11.00 con su esposa y solo pude estar cinco minutos en sauna porque llegaba la hora del pesaje.
Me quedaron faltando por bajar 50 gramos y me descalificaron; entonces quise competir en una categoría subsiguiente 56 kg y me encontré con que el técnico no había reportado la marca mínima disque por estrategia. Fue una gran frustración para mí, y para el país. Luego salieron a decir los periodistas Edgar Perea y Armando Moncada que me había comido un pollo antes de la competencia, algo totalmente falso”. Describió Ismail, antes Juan.
Juan Romero, oriundo de Santander dejó de competir en 1974, luego se formó como entrenador deportivo en la Escuela Nacional del Deporte de Cali, fue técnico nacional por muchos años, se graduó como Administrador de Empresas, funcionario de varias instituciones deportivas en Medellín donde ha vivido la mayor parte de su vida.