Por: Álvaro Aguilar Bolaño, vicepresidente, Asociación Colombiana de Clubes de Fútbol Aficionado ACCFA
Lozano Saavedra y su Comité Ejecutivo, tuvieron la visión, el tacto, humildad, conocimiento, decisión y la capacidad de evitar la intervención de la FIFA a su Federación Peruana de Fútbol, tomando el camino adecuado y pertinente de la autorregulación para reformar los estatutos, los cuales en su estructura eran obsoletos, antidemocráticos, excluyentes e inequitativos.
Contemplaban en el artículo noveno del citado reglamento que los afiliados a la Asamblea Base, eran únicamente dos actores del fútbol peruano: Los 18 CLUBES PROFESIONALES de primera división y las 25 Ligas departamentales.
El mecanismo de la autorregulación que significa regularse, adecuarse y ajustarse uno mismo, para impedir la injerencia de una persona o de un organismo externo, lo utilizó el presidente entrante y el comité ejecutivo de la Federación Peruana de Fútbol, para modificar sus estatutos y adecuarlos a sus pares Modelo de FIFA de 2005, luego de recibir una carta en 2019, firmada por el secretario general de FIFA, JEROME VALCKE, quien en sus apartes más importantes consignó:
“Para solucionar los problemas del balompié peruano en cuestiones relacionadas con la composición de la Asamblea de Bases de la Federación de Fútbol, deberá ser más abierta a fin de permitir una mayor incidencia de los protagonistas del fútbol, que son los jugadores, árbitros, entrenadores, etc. La participación de estos actores debe provocar el dialogo y evitar los conflictos; propiciar el surgimiento de mayorías constructivas para el bien del fútbol nacional, siempre en un espíritu de equidad y democrático.”
En concordancia con lo anterior, recordemos que una vez fueron aprobados por la FIFA los Estatutos Modelo del año 2005, ésta, envió una directriz a todas las Asociaciones miembros, donde les manifiesta que lanzó una ambiciosa política de modernización de los estatutos para las Federaciones.
El objetivo es mejorar la filosofía de gobernanza de sus asociados para solidificar los principios rectores de los citados estatutos y la toma de decisiones en concordancia con los diferentes actores o grupos de interés que hacen parte del fútbol.
En el proceso que adelantó la Federación Peruana de Fútbol, para adaptar sus estatutos al Reglamento Modelo de FIFA 2005 principalmente al presupuesto que gobierna su artículo 10, los llevó a elaborar un proyecto de nuevos estatutos, que fueron enviados a Zúrich, para el estudio de la Comisión de Asuntos Legales de la máxima autoridad del fútbol mundial.
Una vez fueron analizados y evaluados minuciosamente, recibieron el visto bueno, porque estaban incluidos en la Asamblea de Bases, los diferentes grupos de interés que son los protagonistas del fútbol peruano, como: Los clubes de la segunda división, las asociaciones de jugadores, entrenadores, árbitros, fútbol femenino, playa y sala.
El 14 de octubre de 2019, la Federación Peruana de Fútbol celebró la Asamblea de Bases, con el objetivo principal de someter a aprobación el nuevo proyecto de sus estatutos.
Es pertinente y oportuno manifestar que esa Asamblea fue integrada por los antiguos miembros, de conformidad con el artículo noveno de los anteriores estatutos vigentes para la época.
Sometidos a votación los nuevos estatutos, fueron aprobados con 35 votos a favor y seis en contra de 41 miembros que se hicieron presentes. Aunque la Asamblea debía ser conformada por 43 delegados, a la misma no asistieron los clubes Real Garcilaso y Binacional.
Los equipos profesionales que votaron en contra de la aprobación de los nuevos estatutos fueron: Alianza Lima, Sporting Cristal, Universidad San Martin, Melgar y Ayacucho, considerados grandes clubes del balompié peruano por su historia, 3 representación, estructura administrativa y deportiva al ser propietarios de sus escenarios deportivos y estadios.
Entre las Ligas votó en contra del nuevo reglamento, la departamental de la Libertad. Los nuevos Estatutos de la Federación Peruana de Fútbol, aprobados entonces en la Asamblea de Bases del 14 de octubre de 2019, recoge en su integridad los principios de participación democrática, pluralidad, inclusión y equidad, al considerar a los grupos de interés como parte fundamental para el desarrollo del fútbol peruano.
Es así, como en el artículo 12 del nuevo reglamento, establece que los miembros de la Asamblea de Bases son: Los clubes profesionales de primera y segunda división, las ligas departamentales, las asociaciones de jugadores, de entrenadores, árbitros, fútbol femenino, sala y Playa.
En consonancia con esta preceptiva estatutaria, el artículo 25 del mencionado reglamento, consagra los delegados que tienen voz y voto en la referida asamblea, así:
Los 18 clubes profesionales de primera división; 12 clubes de segunda división; 25 ligas departamentales; la Asociación de Jugadores, siete; Asociación de Entrenadores, uno; Asociación de Árbitros, uno; Asociación de Fútbol Femenino, una; Asociación de Fútbol Sala, una y la Asociación de Fútbol Playa, uno.
La Federación Peruana de Fútbol, al reformar sus estatutos y ajustarlos fundamentalmente al artículo 10 del Estatuto Modelo de 2005 de la FIFA, impajaritablemente deja un precedente y referente que deben tener en cuenta, tanto el presidente de la Federación Colombiana de Fútbol, como los demás miembros de su comité ejecutivo, para acoger el camino de la autorregulación y efectuar la urgente y necesaria reforma de sus estatutos.
Actualmente, la rectora del balompié nacional no se ajusta a los Estatutos Modelo 2005 de la FIFA, al no contemplar a los distintos estamentos involucrados en el fútbol colombiano, grupos de interés; por lo tanto, en su estructura reglamentaria se desconocen los principios de pluralidad e inclusión, al establecer en su artículo 2, que la Federación Colombiana de Fútbol está constituida por los clubes profesionales y las ligas deportivas, lo cual se ratifica en el artículo 10, al señalar que los afiliados a Col fútbol son las ligas deportivas y los clubes profesionales.
De igual manera, el reglamento de la Federación Colombiana de Fútbol, contradice al artículo 52 de la Constitución Política de 1991, que consagra que las organizaciones deportivas en su estructura deben tener en cuenta el principio de participación democrática.
Fuente: Departamento de comunicaciones ACCFA