En 380 millones de pesos estaba avaluada esta mercancía de procedencia ilegal

La Policía Nacional a través de la Policía Fiscal y Aduanera en coordinación con la Dirección Nacional de Impuestos y Aduanas Nacionales, se encuentran realizando constantes controles aduaneros en la capital antioqueña, en busca de retirar del comercio toda aquella mercancía de procedencia ilegal, teniendo en cuenta que se acerca la temporada decembrina y es la época en que las personas dedicadas al comercio ilegal, aprovechan para inundar el comercio de estos artículos de contrabando.

Gracias a estos constantes controles y al compromiso de los uniformados, mediante patrullaje en el norte de la ciudad, barrio Caribe, logran identificar dos camiones, la momento en que los uniformados inician la revisión para verificar la mercancía que se encontraba en su interior, lograron evidenciar que se trataba de carros y motos eléctricas de uso infantil, que habían sido ingresadas desde china, teniendo en cuenta la procedencia de la mercancía, los uniformados solicitan a los conductores los documentos que demostraran que estos artículos habían sido ingresados de forma legal al país.

En el momento en que los uniformados realizan la verificación físico-documental de la mercancía, se logró evidenciar que los documentos no cumplían con los requisitos exigidos por las autoridades, por lo tanto, se trataba de una modalidad de contrabando llamado “contrabando técnico”, esta es una práctica utilizada por los contrabandistas, donde ingresan un producto país, pero ante las autoridades declaran otro totalmente diferente a un precio mucho más bajo, la ganancia para los contrabandistas consiste en un gran beneficio económico, al ahorrarse el pago del arancel correspondiente, de igual forma, también fomenta la competencia desleal al comercializar sus productos a un precio inferior al que ofrecen los comerciantes que venden sus artículos cumpliendo con la norma.

Como resultado de este procedimiento, se logró evitar que 246 vehículos eléctricos de uso infantil, que se encontraban avaluados comercialmente en 380 millones de pesos, fueran comercializados de forma ilegal a la ciudadanía y fueron puestos a disposición de la Seccional de Impuestos Medellín quienes continuarán con el trámite jurídico correspondiente y decidirán la finalidad de la misma.

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