Hubo un momento en el que el cielo caleño se llenó de diferentes colores: verde, amarillo, rojo, morado. Y al mismo tiempo, en la cancha de fútbol de la Unidad Deportiva Mariano Ramos, oriente de Cali, una gran cantidad de niños y familias observaban con emoción cómo sus cometas se fundían con el último azul del día.