
La boxeadora colombiana Ingrit Valencia continúa buscando soluciones ocasionadas por la estafa a la que fue víctima al momento de comprar una vivienda, en Ibagué.
Este lunes se hace efectiva la orden de desalojo por parte de la justicia, por lo que allegados a la familia de Ingrit se plantaron en la entrada de su vivienda para evitar el procedimiento.
La boxeadora que estuvo en los pasados Juegos Olímpicos de Tokio 2020, habría pagado a un individuo el valor de 150 millones de pesos por concepto de anticipo para la compra de una vivienda que estaba en remate.
Luego de ello y después de estar casi un año viviendo allí, apareció otra persona quien alega ser el legítimo propietario de la casa y desde entonces comenzó una pelea jurídica, en la que se determinó que Ingrit Valencia tenía que abandonar el inmueble.
Por el momento, la representante del Tolima espera, junto a sus familiares, que la diligencia no se adelante, para realizar la correspondiente oposición. Además, hace un llamado a la persona que al parecer compró la vivienda, para llegar a un acuerdo y buscar una solución.
Deportistas se han unido a su causa .