Un llamado de alerta hace Cenipalma a los productores del norte del departamento del Cesar, basado en las estadísticas de afectación que registran estas tres poblaciones de vocación palmera. Según el centro de investigación, al cierre de marzo de este año se reportaron 21.243 casos, hecho que es visto con gran preocupación, pues de por medio está la estabilidad económica y social de centenares de familias.
“Se ha registrado un significativo crecimiento en el número de casos en los últimos dos años y por eso estamos alertando sobre la preocupante situación en la parte norte del Cesar, donde ya se están superando los 21 mil casos reportados de Pudrición del cogollo”, dijo Alexandre Cooman, Director General de Cenipalma.
Cabe recordar que actualmente en Algarrobo hay 4.488 hectáreas sembradas, en El Copey 9.444, Bosconia tiene 2.469, Agustín Codazzi 9.947 y en Tamalameque se cuentan 750. Así mismo, que la PC se puede extender rápidamente, como ya se ha evidenciado en otras zonas palmeras, por lo que la amenaza fitosanitaria recae en las más de 39 mil hectáreas de palma sembradas en esa región.
Ante este hecho, la recomendación de Cenipalma es incrementar la contundencia en la adopción de prácticas agronómicas e implementar un plan de contingencia para la inmediata eliminación de áreas brote sin evidencia de recuperación, especialmente, en Algarrobo y El Copey, a la par de la definición de estrategias de prevención en zonas aledañas.
Igualmente, Cenipalma recuerda a los palmicultores que teniendo en cuenta que los focos, por ahora, están aislados, es indispensable hacer una identificación temprana, aplicar las medidas de control que la normativa ICA exige, fortalecer los planes de fertilización, garantizar un adecuado manejo de los drenajes para evitar encharcamientos, hacer la remoción de tejidos y en caso de identificar palmas que no muestren recuperación, se debe actuar con eliminación inmediata.
“El llamado más importante es hacia la prevención, las herramientas que tenemos ahora para hacer frente a la enfermedad, son diferentes a las que teníamos hace 10 años, usemos esta ventaja del conocimiento y apliquemos todas las prácticas de manejo que sabemos son efectivas: excelente manejo agronómico, de drenajes y de la nutrición e intervención de palmas enfermas. El buen mantenimiento de nuestras plantaciones y el control de Rhynchphorus palmarum, insecto plaga que a la postre es el que termina matando las palmas enfermas por PC, nos va a garantizar estar preparados para enfrentar la problemática, porque ante la presencia de la enfermedad es importante actuar”, explicó Cooman.
Y agregó que “si no hay una respuesta favorable frente a la intervención de aquellas palmas enfermas, se debe tomar la decisión empresarial de eliminar las áreas brote para cortarle el paso a la PC.”
De otro lado, esta alerta generó que se realizara, recientemente en Barranquilla, un comité de Gerentes para Asuntos Fitosanitarios en el Norte del Cesar, espacio en el que participaron altos funcionarios del ICA tanto del orden nacional como de las seccionales de Magdalena y Cesar, y así mismo, los tomadores de decisión de los núcleos palmeros de esta subzona y Cenipalma.
Entre los compromisos acordados entre las partes, está que el ICA fortalecerá las brigadas fitosanitarias, con énfasis en los municipios de incremento de casos de PC, al tiempo que generará un plan de acción para la contención de la problemática, dentro del cual se reforzará la aplicación de las acciones legales vigentes en la normatividad fitosanitaria, frente a los casos de incumplimiento de la misma que se detecten en la zona.
De otra parte, se adelantarán socializaciones tanto con equipos técnicos como con propietarios, para ponerlos al día sobre la crisis, generar un trabajo articulado y abrir espacios para lograr la concienciación de los diferentes actores frente a la necesidad de actuar de inmediato.
“También se recordarán los temas importantes respecto a la normatividad, el tema financiero, porque seguramente vamos a necesitar usar herramientas financieras para atender la problemática”, precisó el Director General de Cenipalma.
Para no olvidar
Durante los últimos 12 años, la PC ha devastado más de 100 mil hectáreas sumando los daños de Tumaco (Nariño), Puerto Wilches (Santander), Cantagallo (Bolívar) y recientemente en el Magdalena (Zona Norte).
“Vemos que las pérdidas económicas, ya han superado los 3.2 billones de dólares por el recurso que se ha dejado de percibir y por la pérdida de ingreso laboral anual de todas estas áreas que se han visto totalmente devastadas por la Pudrición del cogollo. Desafortunadamente, esta es una enfermedad que tiene una afectación que va más allá de lo técnico, y es la social.
Esta enfermedad cuando llega a los municipios que tienen vocación casi de 100% palmera, pone en riesgo la estabilidad económica y social de productores de pequeña, mediana y gran escala. La situación es bastante preocupante, pero sabemos que en el caso del norte del Cesar estamos a tiempo de tomar acción y decisiones contundentes contra la PC”, concluyó Alexandre Cooman.